Compuesta por copiosos bosques y amplias y solitarias playas de arena fina, Mar de las Pampas, autodenominada "ciudad sin prisa", es el remanso de la costa atlántica, donde el visitante puede disfrutar momentos de paz y armonía en pleno contacto con lo natural.
Los visitantes pueden realizar diversas actividades, como paseos a caballo, cuatriciclos, bicicletas, caminatas y sandboard entre otras. En el agua, deportes náuticos como el surf, wakeboard o natación son los elegidos a la hora de refrescarse.
El centro cuenta con una variada oferta gastronómica y paseos de compras donde se pueden adquirir artesanías locales.